HUEVOS FRITOS
Por persona
1 ó 2 huevos frescos de buena calidad
abundante aceite de oliva
opcionalmente: 1 diente de ajo.
Pon en una sartén pequeña abundante aceite a calentar. Opcionalmente puedes poner al mismo tiempo un diente de ajo, para que se vaya confitando (se lo vi hacer a un amigo y el resultado me encantó). No se trata de que el aceite humee, sino de que esté caliente y fría con suavidad (puedes comprobarlo con un trocito de pan).
Casca los huevos con cuidado en el aceite, añade un poco de sal (yo la prefiero gorda) y fríelos hasta que la clara cuaje, pero la yema esté líquida. Sácalos con cuidado con ayuda de una espumadera, escúrrelos y sirve inmediatamente.
Puedes acompañarlos casi con cualquier cosa, pero como mejor están es con pan fresco. Comprendo que las normas de urbanidad indican que en la mesa no se come con las manos, pero los huevos fritos como mejor están es así, así que no seáis cursis y no los maltratéis con un tenedor.
De mi hijo Alberto estudiante en un piso.